miércoles, 14 de septiembre de 2011

Actividades del CID en Briones Montoto.



Briones Montoto, pueblo Cautivo de Pinar, rinde homenaje al comandante Huber Matos con su trabajo en el partido Cuba Independiente y Democratica.

El abogado campesino.

                                                  Felipe. Segundo desde la Izquierda

Paso mucho tiempo desde que terminara con expediente de oro la escuela de derecho, quizas podria estar en estos momentos en algun bufete comodamente trabajando. Pero no lo hace, la razon muy simple, no piensa igual que lo hacen los que mandan en la justicia de este pais. ahora es un simple campesino con titulo de Licenciado en derecho, quizas sea mas feliz sembrando frutas que castigando a inocentes.

miércoles, 30 de marzo de 2011

El reencuentro con los que se fueron.

















Son muchos los que han tomado el camino a la otra orilla, otros quizás mucho más lejos, siempre y cuando el mar los separe de este otro margen, donde se quedan sepultados los mejores recuerdos de su vida, destruida y desterrada, convirtiéndose para siempre en un extraño en un país que te acoge, pero que siempre será una casa donde reposarán tus huesos al llegar tu hora, pero donde no pasará un minuto sin que recuerdes ese sol y esa hambre que pasaste y los inventos que tenias que hacer para vivir. Otro ejército nuevo se prepara a parte por la vía que sea, pero lejos de este lugar maldito por el comunismo y la codicia de unos pocos.
Me encontraba hace apenas unos días navegando en internet, en una sede diplomática amiga donde pude estar una horas, más que navegando, volando libre en brazos de la diosa internet, pero de la libre, no de la versión cubana, con sus alas mutiladas. Entonces abrí una cuenta en eso que aquí nadie conoce y que llaman Facebook, en realidad fue más curiosidad que otra cosa. Que sorpresa cuando tenía frente a mí el rostro sonriente de todos aquellos que formaban parte de la historia de nuestro pequeño pueblo cautivo de Briones Montoto. Fue como leer en un libro de historia o ver como caen las hojas del libro de historia local. Era muy joven cuando Cabana y su esposa se fueron y allí los encontré, vi también a Antonio Montero el amigo de mi tía la maestra Caridad Calzadilla, conocida como Beba, la que le dio clases a toda esta generación y que hoy malvive retirada y olvidada por este estado tan benevolente y humanitario. Allí esta Niurka Lacoba, un símbolo de la belleza local de nuestro pueblo (aún sigue siendo bella), y qué decir de nuestro director de la escuela y su familia, Leivis y Reina, dos amigos de los años y formadores de las nuevas generaciones que aún los extrañamos y hablamos con ellos con orgullo. Ariel Plasencia, uno de los jóvenes amigos que como todos nosotros soñaba con una vida mejor y que por fin la consiguió. Sergio Cabrera, Los Gascón, NIvaldo el amigo que tanto sufrió y que hoy junto a su esposa Daysi viven su nueva vida, su hijo el chino que lo recuerdo mucho más porque aún tengo aquí guardado mi primer teléfono celular, un Motorola V-180 que le compre. Mercy la del contenedor y René que más que amigos son parte de mi familia, igual que al chino el de la corriente y todos esos cuyos rostros creíamos haber olvidados, pero no allí estaban, más blancos, más cuidados pero eran ellos, seguían siendo los mismos que ayer estaban haciendo cola para el pan o buscando una libra de aceite o manteca o dándole una muela a Mariano el Carnicero por una bolsa de leche. Por eso es que bajamos algunas de estas fotos y la compartimos con los amigos comunes, los que estudiamos juntos, los que juntos malvivimos aquí y que rebosan de alegría al ver la alegría de ustedes.    
Mis respetos y el cariño de todos los que aunque no los dejen conocer Facebook, saben de ustedes porque en Cuba, con dos que se quieran con uno que sepa basta.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Carta Abierta a Cubanos y Cubanas.

Carta abierta a los cubanos y cubanas.

Yo no me considero una amenaza para nadie, menos para mi país. El hecho de buscar para esta maltrecha isla, una manera alternativa de llegar a un verdadero estado de derecho, donde no se pongan los intereses elitistas por encima de  los del propio pueblo, no hacen de mi una persona peligrosa en ninguna forma, menos cuando las armas que siempre he utilizado han sido las palabras. Soy parte de una mayoría que se pretende insatisfactoriamente vestir de minoría, ocultándola detrás de infames nombres y dolorosas calumnias. Pobre del gobierno que tiene que buscar en su pueblo, la obediencia por medio del temor y el miedo, que como malvada madrastra, impide a los que debía proteger y cuidar, alcanzar su desarrollo pleno. Soy miembro de una sociedad civil que se alza como un torrente indetenible de esperanza y fuerza renovadora, somos sometidos a las más disímiles presiones por parte de las fuerzas especializadas del Ministerio del Interior, que lejos de ser el guardián, se ha convertido en el carcelero del pueblo, un pueblo que prefiere perder la vida en las aguas del estrecho de la florida, a permanecer en esta vida oprobiosa y mancillada. 
Hace unos días, específicamente el 16 de febrero de 2011, fui detenido en plena calle por operativos de la policía y la seguridad del estado y conducido a su sede en Pinar del Río. El motivo aparente fue el interés en conversar sobre una publicación que dirijo actualmente, el Semanario Nuestra Voz, el motivo real es la preocupación que se dibujaba en los rostros de estos oficiales, porque exista una nueva publicación alternativa, que sea vocero de la sociedad civil cubana. Que habían sido permisivos dicen con nuestra revista bimensual Renacer, nosotros no queremos que sean permisivos, queremos sencillamente que se nos respeten nuestros derechos a decir y escuchar, a tomar nuestras propias decisiones sean buenas o malas, corriendo nosotros el riesgo humano a equivocarnos.
Ya no corren aquellos tiempos en que solo pensar en cambios era un delito, en que la autocensura impuesta desde edades tempranas, hacían su efecto en toda la población, alucinada aún por los destellos de la revolución. Hoy las personas comienzan hablando en un susurro y poco tiempo después gritan sus verdades.  Ya llegó la hora de ponerle nombre al verdugo y al juez que firma la orden, a sabiendas de que es injusta e ilegal, es cobarde  quien calla frente a la injusticia, con pleno conocimiento, de que su actuar no es correcto. 
Ya llegó la hora de los valientes, de caer uno y levantarse miles, la sociedad civil cubana necesita de todos para construirse, y los unos apoyan a los otros, como la hermandad en que todos son iguales y diferentes.
Esta carta abierta, es la manera de decir al mundo que en mi país, el pensar y actuar diferente a las normas de la élite que nos gobierna, es motivo suficiente para ser una amenaza pública, e ir a prisión. Y que miles de cubanos al igual que yo, estamos dispuestos al sacrificio que sea necesario para dar a nuestra patria su ansiada libertad. Cuatro años de mí vida perdí por pensar como pienso, pero la convicción en lo que hago, y los logros de estos años justifican con creces lo sufrido y lo que esté por sufrir.  Mi mayor compromiso en estos momentos es con Cuba, aquellos que hagan lo que hagan por impedirlo, mancharán sus manos con un hombre inocente, ya su conciencia les dirá que más allá de ideologías y beneficios, existe algo más etéreo que es el compromiso sagrado para con la tierra que nos vio nacer y languidece bajo el oprobioso yugo.
Fernando Martínez Calzadilla
  Director de la revista Renacer y el Semanario
   Nuestra Voz. PCL.

miércoles, 2 de febrero de 2011

Violencia, causas, culpables y culpados.


Por: Fernando Martínez Calzadilla.

La noticia corrió como pólvora por todo el pueblo, habían asesinado a Lorenzo, apenas eran las seis de la mañana, cuando un joven por motivos de celos, se lanzara sobre el hombre cincuentón y clavándole un inventado instrumento, le había segado la vida a un hombre trabajador.  Cosas como estas están ocurriendo a diario en todo el territorio de la isla, al igual que suceden en cualquier otra parte del mundo. Habría que preguntarse entonces, ¿por qué suceden hechos de esta envergadura y nunca se conocen las causas y los sucesos como son en realidad?,  hay que conformarse solo con los retazos de noticias que traen los chismes, que a la larga son un amasijo de imaginación y tergiversación, como se dice por ahí “en el pueblo del lado no se sabe lo que pasa en este de aquí”.  No se pretende que se habrá una página roja al estilo de los diarios sensacionalistas, bastaría con dar a la sociedad los detalles de las agresiones y educarlos, no con los programas de TV, como los seriales policiacos, donde solo trabajan héroes superdotados que todo lo resuelven al instante, la envidia segura del detective Holmes.
La violencia es una realidad que corroe el mismo tuétano de la sociedad cubana y el primer paso para combatir y erradicar este mal es reconocer que existe, que no vivimos en la sociedad ideal y que todos desearíamos, que la nuestra a pesar de los esfuerzos de muchos aún dista bastante de ser paradisiaca.  La violencia es una forma actual de comunicación atrofiada por las experiencias traumáticas, a las que los sujetos están sometidos a diario. Esta intimidación a la que pretendemos someter a los semejantes en todo momento, es un mecanismo de defensa, una proyección para protegerse de los potenciales depredadores en esta jungla que se vive en la actualidad.  La violencia es algo con lo que la mayoría de los jóvenes se cría y convive a diario en las casas y las escuelas. Apenas el niño abre los ojos comienza a ver a una madre humillada y maltratada por un padre alcohólico y abusivo, producto de las mismas carencias espirituales y materiales del sistema. Presencia el impúber los diarios conflictos que llegan al maltrato físico y la tortura psíquica que es peor,  entre los representantes de las múltiples generaciones, que se ven obligadas a convivir en un reducido espacio habitable, construido hace siglos, por quien pretendía forja una familia y que se aventuro con el dicho de que “quien se casa, casa quiere”. La carencia de estructuras que hagan verdadero frente a estas violaciones y en la mayoría de los casos, la inoperancia y la indolencia de las existentes, son las principales causas de la indefensión de las víctimas de los abusos, las que son mujeres en su mayoría.
Los infantes se ven sometidos a una gran presión, al tener que soportar un gran desgaste mental por estas experiencias traumáticas, que a la larga, solo dan como fruto a un individuo carente de afectos y con una personalidad problemática. La familia cubana por idiosincrasia valora a los psicólogos y psiquiatras como médicos para locos, esta es otra causa real, para que muchos pequeños y jóvenes, que pudieran ser atendidos por violencia en el hogar y obtener resultados positivos, no asistan nunca a ser tratados con un especialista, y ya cuando la persona cae en manos de la ley por cualquier delito cometido, se inicia un camino que raras veces tiene retorno.
Cuando se ingresa al sistema de educación, se integra el joven o el niño a una atmósfera completamente nueva y aterradora, donde los conceptos de responsabilidad y normal desarrollo se han perdido en gran medida y tiene que adaptarse o resignarse a ser la oveja negra de la escuela. La guía de profesores preparados es menos frecuente en estos días, la rectitud ante el estudio se ha cambiado por la necesidad de intercambiar los conocimientos por algo, que puede ir desde dinero, ron, comida a favores sexuales de los alumnos y alumnas, en esta nueva escuela todo está permitido, desde el consumo de alcohol, cigarros y cuanta cosa es suministrada por sujetos inescrupulosos. Es en este caldo de cultivo propicio a cambios, donde se muta la personalidad de nuestras nuevas generaciones, que aprenden a calcular, viendo cuantos dólares ganan por una transacción por vender cualquier cosa o en cómo está el cambio del euro por el chavito.  ¿Qué papel juegan en todo esto de prevenir, las organizaciones estudiantiles?, en este caso particular, cuando se reúnen los dirigentes estudiantiles, jóvenes todos, las reuniones se extienden por horas analizando asuntos que jamás se resolverán y otras tantas alabando lo bien que esta todo, pero de la verdadera cara del problema, de la parte fea, pocos se atreven a hablar y si lo hacen sucede como al joven de la UCI, ya ustedes saben, ¡Candela con él! La política de mantener a la sombra la podredumbre, es algo que cada día se hace más difícil de realizar, pero los esfuerzos no se escatiman, no se le puede dar al mundo la errónea idea de que en el país de las maravillas, Alicia no es feliz y los jóvenes tienen tantos problemas, como los tienen los de otro lugar en el mundo.  
La falta de alternativas para una diversión sana, lejos de las discotecas o lugares por divisas, crean un profundo conflicto entre lo que se proclama y lo que se vive. Si no tienes divisa, porque te pagan con una moneda desvirtuada y apenada, como puedes entonces entrar a un lugar al que solo puedes acceder con el peso fuerte.  No existe un interés creado a visitar sitios de utilidad cultural, la política lo ha absorbido todo, los cines, exposiciones de arte, museos y los otros lugares que no es necesario un desembolso muy grande apenas existen, la costumbre de salir simplemente a caminar o conocer otros lugares no se puede practicar, por ejemplo, si viajas a la habana a conocer el capitolio o la Habana Vieja, toda una horda de policías se encargaran, bajo la atenta mirada de las cámaras de vigilancia, de hacerte sentir como un criminal o un emigrante en tu propia capital. La mayor responsabilidad del desarraigo cultural y la pérdida de los valores históricos locales, recae en los dirigentes comunitarios, en todos esos que prefieren asumir el rol de observador a el de participe y gestionar por sus electores, algo que beneficie a la mayoría.  A su vez y a pesar de la carencia de alternativas, el estado amplia constantemente el marco sancionador de leyes arbitrarias que como la conocida por “Peligrosidad Social” envían  miles de jóvenes a prisiones, que lejos de reeducarlos como anuncia su eslogan, deforma para siempre la personalidad de la persona, dejando  perennemente una profunda marca que jamás se podrá borrar, porque no se dé otras, pero la prisión cubana es una experiencia traumática. Eventos desgraciados y desafortunados, han convertido a personas sancionadas a penas de 3 a  5 años, en reclusos que cumplen 30 años, cuando podían haber sido salvados si el tribunal hubiera tenido en cuenta otras alternativas. Este sistema que no reeduca, solo trae como consecuencia la reincidencia de los ex reclusos en los centros penitenciarios, consecuencia verdaderamente nefasta.
El índice de criminalidad y de delitos que vincula la violencia en la comisión del hecho, ha aumentado considerablemente a la par de delitos de índole sexual violentos. La causa indiscutible es la pérdida de valores de la sociedad y la utilización de estos eventos como muestra y vía de escape al estrés a que están sometidas las personas.
No hay ninguna causa que sea capaz de justificar un acto violento, pero quizás haya muchos más culpables en un mismo hecho, que el sancionado por él, porque delito es dejar que una persona tome un camino equivocado cuando podemos salvarla y lo empujamos a él con nuestra apatía, no educarla en los preceptos de la ética y la moral, anteponiendo los principios políticos a los humanos. Culpable, es quien no deja a su pueblo otro recurso para malvivir, que el robo y la malversación de los recursos que a su custodia se entregan, quien envía a niños de 15, 16,17 años a centros de menores, que lejos de educarlos los destruyen psíquicamente, criminal es también  quien vende alcohol y castiga al ebrio y lo critica públicamente, más malhechor es quien no prevé, previene y está atento al buen desarrollo de todos los ciudadanos sin distinción alguna.
Entonces a la hora de valorar los criterios de testigos, jueces y partes en un juicio, deberían profundizar en la investigación sobre quién es el verdadero culpable, el acusado o el que permitió de manera deliberada que llegara allí, permitiendo que un pueblo entero se vea asolado por el más cruel de los demonios, la violencia.    

La verdadera cara de la prisión cubana.

Testimonio de Víctor Pérez Martínez, preso a la edad de 16 años de edad. En estos momentos se encuentra participando en diferentes actividades de la sociedad civil.

En Cuba los menores de 18 años no son tratados por procedimiento propiamente judiciales sino por comisiones de psicólogos, pedagogos y otros profesionales bien capacitados, si el delito requiere internamiento, no se produce jamás en prisiones ni en granjas con presos adultos. Existen establecimientos especializados donde reciben tratamiento para combatir los problemas que originaron su conducta.
Asamblea Nacional del poder popular (sistema judicial).

Nunca la vida me había regalado nada tan maravilloso, sin embargo como gran parte de todos los cubanos creí tener mis manos la suerte de haber nacido en un país justo, donde todos los ciudadanos tenían oportunidad por igual de alumbrarse con su talento y no la de hundirse en la miseria humana de la eterna inocencia. Tenía entonces quince años, comenzaba mis estudios en un politécnico agrícola ubicado el kilómetro 8 de la carretera a la Coloma, no puedo decir que era el mejor alumno, pues aún cuando académicamente lo fui, mi carácter hiperactivo me convertía en un joven inmaduro y carente de la educación y el cariño que todo hijo a de recibir sus padres. Pero así es la vida, nada ha de ser completo, para entonces tener la voluntad de buscar lo que nos falta. La imperfección, alguien escribió una vez, es la obra de toda acción.
No era la agronomía mi gran anhelo, pero después de haber alcanzado el número uno en el escalafón y haber obtenido por mis méritos académicos la carrera que tanto me gustaba (electrónica), alguien con más poder adquisitivo o relaciones ocupó mi lugar en la carrera que comenzaría en septiembre, por lo tanto no me quedó otra opción que superarme en el lugar que fuera. Esperaba ansioso cumpleaños número 16, creyendo un sin fin de mentiras y esperando un milagro que nunca llegó.
Era menor de edad, por tal motivo se justifica mi inocencia, pero nunca pude justificar el día en que me equivoque, cuando sin pensar yo y un amigo mientras jugábamos béisbol, cometimos un error.
Jugábamos, y la pelota fue a dar al interior de un almacén algo descubierto pues sus puertas eran tejidas de alambre perle y la separaba del piso, un espacio de un poco más de 30 centímetros, suficiente como para que pudiera deslizar mi cuerpo al interior, en busca del objeto, por la inexperiencia y el ansia de tener lo que nos era prohibido, tomamos una caja que estaba a la mano con 15 escobillones y tres cartones de huevos. Inmediatamente fuimos detenidos y terminamos en los calabozos más tenebrosos que un joven de quince años haya podido visitar. Mi amigo se mantuvo firme, tanto que habló una palabra. En cambio yo gritaba, lloraba, eran mucha oscuridad y demasiado silencio, como para comprender en aquel entonces que el mundo es la curiosidad eterna de quien cree lo conoce todo. Todos los detenidos me apoyaban gritando a mis carceleros, "saquen a este niño de aquí". Como consecuencia de mi constante ajetreo y los gritos se presentaron dos oficiales que me trasladaron por un oscuro pasillo a la celda más alejada de la puerta, allí se encontraba un hombre de casi 40 años, no entendía porque me habían quitado las esposas y menos aún la presencia callada y fría de aquel nuevo compañero de celda. Era tanta la presión y el hostigamiento que comencé a gritar nuevamente, aquel hombre se puso de pie y me dijo-no estoy para gritos-llorando le explicaba que no quería estar ahí, que sólo era un joven de quince años, quien no había cometido ningún crimen, pero tal parecía que aquel hombre estaba programado por aquellos que no estaban dispuestos a seguir escuchando mis gritos. Yo continúo gritando y de pronto recibí un gran golpe y las réplicas de ese hombre-no te dije que no seguirás gritando-ante la amenaza le respondí con la misma violencia, dándome cuenta de que los oficiales estaban escondidos detrás de la puerta, uno decía-abre la puerta que se abrió el gallito- y el otro respondió- déjalos que se den unos cuantos golpes-al observar mi rebeldía me condujeron a otra celda donde existía una cama y un sanitario, cosa que no había en las anteriores, también empezaron a tratar diferentes pues ya no sabían qué hacer con mi carácter. Empecé a ceder mientras caía en la trampa psicológica de que sólo pretendían ayudarme, yo sólo tenía tres opciones, morir, resistir o creer en sus promesas.
Opte por resistir para ver que traían los venideros días. Mientras tanto mi madre desde un hospital sufría el camino infernal donde me encontraba, sabía que mis sentimientos se nutrían de odio, pues eran pocos los años de mi vida para enfrentar este sentimiento marcó tanto mi juventud esta experiencia que por eso consideré el 21 de mayo de 1999 mi mejor cumpleaños. Hay hermosos regalos que se adornan con





espinas. La represión, la presión física y psicológica, el incumplimiento de lo establecido los códigos nacionales y de todos nuestros derechos humanos, fueron sin dudas los obsequios más útiles que recibí en aquel entonces, que me ayudaron a entender desde temprana edad y hasta hoy la realidad de esta nación. Desde ese día hasta hoy he conocido varias prisiones, pero ninguna se diferencia de la prisión mayor en que viven más de 11 millones de cubanos. Aprendí que no hay mucha diferencia entre los de dentro las prisiones y los que dicen ser libres, que igualmente se engaña, se manipula, se agitan de un lado para otro según la conveniencia de los gobernantes. Se les dice qué comer, como vestirse, a que lugares ir o no, se les programa lo que pueden ver y lo que no pueden ver, en fin son con presos como lo fui yo. Aprendí además a agradecer sin odio a quienes me dieron oportunidad de convertir cada cumpleaños de mi corta existencia, en un arsenal de duras experiencias, dispuesto a luchar y vencer contra el peor de los verdugos, el miedo.
Existen muchas formas de matar.
Cuando a un joven lo envías a prisión sin un  motivo real, mezclándolo en un mundo inmoral y peligroso por naturaleza. Cuando sin pensar en su familia le arrancas de sus manos el derecho de estudiar y luchar por un futuro mejor, sin importar la edad, sus sentimientos, su pasado, los motivos. Cuando destruyes sueños y construyes realidades manchadas de injusticias, que sólo dejan lágrimas y un cementerio de silencio, como cuando sólo te interesa reprimir, también se es un asesino
"asesinos tontos que creen que al matar un hombre matan su verdad".

   

Dos años de vivir un mágico sueño.



Hace apenas dos años que Salió de su capullo, para convertirse en asustadiza mariposa, el primer número de la Revista Sociocultural Renacer. Cuando les conté a los amigos sobre mi sueño, hubo los que me dijeron que estaba loco, que una revista de este tipo apenas sobreviviría unos meses, pero los hubo también que me dieron la mano y me dijeron caminaremos contigo. Hoy algunos han quedado en el camino, porque exigíamos una cuota demasiado alta de sacrificio, otros se han sumado y aún están aquí, otros vendrán en un futuro, a esta  casa de todos los cubanos. No han sido pocos los contratiempos y los sinsabores, las decepciones y los reveses, pero el premio ha sido mucho más grande, el ver este segundo aniversario con nuevas ideas, ímpetu y deseos de seguir adelante, de todas aquellas personas que conocen de este proyecto, que más que proyecto es parte de nuestra propia vida. Este se dice que será un año decisivo para la isla, un año en que se esperan cambios y grandes transformaciones a nivel nacional, pero no habrá cambio lo suficientemente grande si no se empieza a cambiar desde dentro del hombre, si no comienza a sentirse en las venas el ardiente deseo de transformar y moldear la arcilla incólume de la sociedad civil cubana. Mucho se habla de unidad por los que atentan diariamente contra ella con sus acciones y palabras, necesitamos hechos concretos, proyectos viables que revitalicen la savia que alimenta nuestro afán de lucha, basta ya de malgastarnos en cosas que no llegan a ninguna parte, es el momento en que nos sintamos verdaderamente como hermanos, no para ponernos zancadillas, sino para ofrecernos la mano, no una, sino ambas.
La sociedad civil siempre ha tenido sus detractores, pero el enemigo más peligroso de todos es la falta de amor, porque la gran obra de hacer una patria nueva, es tarea imposible de unos cuantos, para agitar la mezcla se necesitan muchas manos. Entonemos entonces el himno de la nueva Cuba, con el deseo del que armoniza un efluvio de pasión, como quien compone la más hermosa de las melodías, que al escucharla el corazón parece saltar de gozo, recordando siempre, que una canción para ser verdaderamente completa, necesita de muchas notas, de la policromía de los altos y bajos, de las corcheas y del encanto apasionado del que la escribe y de quien la interpreta.
No hay obra que no exija sacrificio, y más aún cuando esta obra tiene carácter de hazaña. Hay que estar preparados para formar entre todos, la nueva maquinaria que eche ha andar, todo el mecanismo que mueve la razón de existir de la patria nueva. Nosotros estamos ante nuestro propio muro de Berlín, ya han caído algunas piedras, la demora en abrir una brecha para que penetre el haz de luz de la libertad, está en nuestras manos. Unamos todos los esfuerzos en uno solo, gigantesco, inmenso como la cordillera de oriente, como las palmas reales que mecen su penacho verde, bajo el cálido sol del trópico. Rompamos al fin con el esquema de pensar primero en lo que me pasará si opino o hablo diferente, empecemos a pensar en lo que les pasa a otros por hacer lo mismo por nosotros , y de que  manera podemos revertir esta situación, y quitar la mordaza de la censura de la boca de la verdad. No seamos más la piedra al lado del camino que pasa inadvertida, seamos en lo adelante la piedra en el zapato, que molesta al punto de hacernos quitar el calzado para echarla fuera. Hacernos notar, lograr que se nos de la debida atención, la que merecemos, a la que voluntariamente hemos renunciado por cuestión de comodidad, miedo o la dolorosa sensación de no poder hacer nada. La fuerza está en las pequeñas cosas, en lo insignificante, la pieza más pequeña es la que detiene el mecanismo de un gran reloj, porque todo ingenio humano necesita, para funcionar correctamente en todo su potencial, de todas sus piezas. Podemos hacerlo andar, incluso producir sin una u otra, pero el fruto no será nunca el mismo. Hagámonos la conciencia de que esta inmensa máquina que es Cuba necesita de sus once millones de minúsculas piezas, que es imposible hacerla funcionar apartando un número tan grande de elementos de la magnífica maquinaria que es la sociedad civil.                


Se publica el número uno de la revista infantil Rayito de Esperanza...

Se

El Proyecto Comunitario para la Infancia Rayito de Esperanza, dirigido por la señora Yeney Fernández Ramos, y cuyo trabajo está encaminado a los niños de las diferentes comunidades, cuenta ahora con una revista infantil dirigida a este público, tan difícil pero agradecido. Con un equipo de trabajo un poco inexperto en estos temas, ya salió en forma de edición especial el primer número de esta revista, que lleva el nombre de éste proyecto cívico. Entre las secciones que se pretenden realizar y que ya salieron en este primer número se encuentran; "mi tío el cuentero", "páginas de la historia mundial. Aprendiendo", "crucigramas", "¿cómo se hace?","trabalenguas y adivinanzas", "páginas de poesía","rescatando tradiciones", "cuentos infantiles del mundo","los peques de ayer", "diccionario de nombres","noticias".Estas y muchas otras secciones llegarán al público infantil en esta publicación periódica que pretendemos salga a la luz cada tres meses, en un esfuerzo para que los más pequeños de casa, tengan un espacio de diversión sana y aprendizaje.


¿Son los Periodistas Independientes cubanos profesionales de las noticias?


Por: Héctor Barrios Planas.

A la pregunta de ¿qué es el periodismo?, nos sale la disyuntiva de si el periodismo es oficio o es profesión. Se puede definir como cualquiera de los dos, oficio o profesión, ya que anteriormente, para ser periodista no era necesario tener una carrera universitaria. Este es un hecho muy frecuente en nuestros días, ya que en muchos países los periodistas ejercen el oficio de informar a la sociedad sobre las cosas que le interesan, siguiendo unos cánones éticos y los códigos preestablecidos por la profesión en dicho país. También es notorio que ya varias universidades del mundo ofrece una carrera de comunicación social, donde además de estudiarse las técnicas y bases del periodismo, se aprende todo lo concerniente a los medios de comunicación, y la explotación de estos medios, además de la manera de hacer que el mensaje a través de los grandes medios de comunicación masiva, llegué a un mayor número de personas.
Pero la base indiscutible del periodismo en cualquier lugar del mundo, y sea cual sea el caso del profesional, ya lo haga por oficio o profesión, es la experiencia acumulada y la vocación que deben nacer con la persona cuando decide ejercer una profesión tan trabajosa. La pasión y el amor por lo que se hace puede hacer el trabajo hasta cierto punto relativamente sencillo, porque ante todo el periodista debe sentir lo que hace, no utilizar su poder mediático en detrimento de otra personas por motivos políticos, religiosos, u otro cualquiera, el periodista tiene que ser, y digo tienen que ser, una persona imparcial, quien no se deje influenciar por la presión de ningún grupo o persona para que manipule la noticia a favor de unos y en contra de otros. La transparencia y la claridad tanto en las fuentes de donde se obtiene la información, como los métodos de obtenerla, no sólo dará prestigio a los periodistas en sí, si no que dará credibilidad al medio en general donde este periodista publica sus noticias. Cuando el profesional, o periodista independiente o cualquier otra persona cuyo objetivo sea transmitir noticias de manera regular, comete el grave error de decir una mentira, de hacerse eco de una falsedad o sencillamente se deje influenciar por tercera personas, este profesional acaba de comenzar el principio del fin de su carrera, lo mejor será de busque otra profesión a la que dedicarse, ya que si no tiene el temple de
Imponer la verdad y la imparcialidad sobre todo las cosas, sencillamente no tiene madera para ser periodista. El objetivo fundamental del periodismo y de los periodistas por ende, es contar, relatar, transmitir lo que ocurre la sociedad, para esto tiene muchas vías, unas más fáciles de otras, por lo que el profesional debe adecuarse a la manera más factible de transmitir su noticia. Es decir existen diferentes clases de periodismo dependiendo del tema o enfoques que se le dará noticia. Las dos grandes clasificaciones son el periodismo informativo y la del periodismo investigativo.
La primera se encarga de informar hechos actuales que tienen importancia y relevancia para un grupo determinado personas, o del público en general. El interés fundamental del periodista informativo es localizar en el momento los acontecimientos que involucren a un personaje, o un grupo de personas de interés social. Su meta principal y a la vez su principal problema es la inmediatez, si la noticia no es inmediata, ya dejó de ser una noticia válida para el periodismo informativo. El impacto en general al público es el motivo y la meta de ese tipo de periodismo, ya que si se pierde este impacto informativo el carácter noticioso de este periodismo se perdería con el.
Por su parte, el periodismo investigativo, aunque también expresa una información específica sobre determinado tema o persona, la característica especial de este periodismo es que no sólo toman cuenta del presente, sino que se basa en hechos ocurridos en el pasado, es decir las causas que generaron el hecho que se narra en la actualidad. Su punto de partida y la clave de este periodismo es la investigación, encontrar datos, consecuencias, rastros que hayan quedado del hecho en sí, testimonios de personas que vieron o estuvieron involucradas en el mismo. Este periodismo no necesita como materia prima una noticia, porque aunque puede nacer de ellas, este periodismo tiene la característica peculiar de que por sí mismo puede generar una noticia.
El periodismo independiente cubano, es sin duda un caso particular, por ejemplo en México han muerto muchos periodistas a manos de los narcos, al igual que otros países de América Latina, en Cuba el periodista se incluye en una lista de no personas, se le priva de todo derecho a investigar, a publicar en medios estatales, y se le sanciona por la ley 88 si lo hace en medios de prensa extranjeros. Pero sin dudas el periodismo independiente cubano ha venido a traer un nuevo intento de crear una nueva sociedad civil en Cuba. Nuestros periodistas por este hecho no son profesionales, sólo son personas, que realizan el oficio de divulgar el contenido noticioso, que se genera a diario en cada comunidad. Un trabajo este que requiere de constante preparación, de un esfuerzo vitalicio, de mucho valor, pasión y amor, componentes que generan un verdadero periodismo profesional, por eso podemos considerar que tenemos todo un ejército de periodistas profesionales, que basan su trabajo en la seriedad y el deseo de mantener informado a un pueblo, sometido a la censura y  la manipulación de su medios de prensa e informativos.


Héctor Barrios Planas.
Finca la Campana. Pinar del Río.
Obrero.

El modelo económico no satisface las expectativas del pueblo cubano.


Por: Jesús Silva Gala.

Son muchas las interrogantes e inquietudes que vive el pueblo de Cuba en estos últimos tiempos, donde la necesidad económica y financiera de cada ciudadano ocupa el primer renglón estresante; este "nuevo modelo económico" no satisface las necesidades y expectativas del pueblo trabajador, aseguran muchos luchadores pacíficos y ciudadanos en general. En mi criterio coincidido con el licenciado Oscar Espinosa, que no hay reformas, que en los lineamientos que se discutirán en el congreso del partido el próximo mes de abril, es más de lo mismo, no hay un modelo se están probando experimentos destinados al fracaso, en cualquier sistema ideológico donde se pongan en práctica. Hay muchas afirmaciones incluso del ministro de economía donde plantea que no hay reformas, que esto sólo es una actualización del viejo modelo económico y que nadie piense que se va a ceder la propiedad, todo lo contrario, sólo la persona la va a administrar. He ahí la contradicción, en mi punto de vista, coincidente con el señor Espinosa, de que el modelo no necesita ser actualizado sino cambiado, por resultados y experiencias ya vistos y vividos en décadas anteriores.
Los ciudadanos cubanos, los que tienen que buscar su vida en la calle parecen escépticos, todos comentan que ya en el pasado se dieron ciertas aperturas llamándolas de diferentes formas; normas, modelo, oportunidades, experimentos, reformas, como se les haya llamado no es lo importante, lo importante es que después de esa cierta apertura, que tras haberse probado hace algunos años, después de probar la experiencia, se volvió a cerrar la economía. Eso puede explicar la cantidad de personas que acuden desesperadamente a averiguar cómo darse de alta en el trabajo por cuenta propia, cualquiera puede verlos, muchos dibujan nuevos horizontes, nuevas formas de sobrevivencia, de mejoras económicas (como sea) y a otros muchos que no hacen más que legalizar sus negocios clandestinos o "por la izquierda" lo cierto que la mayoría piensa que "hay que aprovechar el momento mientras dure". A pesar de que el pueblo de Cuba conoce, y comparte la idea y sabe que en "el proyecto de lineamientos de la política económica y social" conocido entre todos como "nuevo modelo económico", no es la solución para la crisis económica que vive el país desde hace varias décadas, Cuba necesita mucho más apertura, no sólo en el sentido económico, Cuba antes que nada necesita libertad.

Jesús Silva Gala.
Periodista independiente.
Miembro del consejo de redacción
De la Revista Renacer.


La hipocresía de engañar a los tuyos.


Por: Tania Mirabal Madera.


Últimamente varios espacios de la televisión cubana, como Pasaje a lo Desconocido y otros tantos, se han hecho eco de todo el trabajo que se encuentra realizando Mariela Castro, en base a que los homosexuales cubanos disfruten de los mismos derechos que el resto de los ciudadanos, echando abajo todas las ideas y tabúes arraigados durante tanto tiempo en la idiosincrasia del cubano. En más de una ocasión se ha  abordado el tema de los homosexuales, transexuales en fin todo tipo de asuntos  de género. Lo que no se ha dicho en ningún momento es la posición adoptada por Cuba ante el hecho de la votación a favor de que en Irán, país amigo de Cuba, se haya procedido al ahorcamiento de jóvenes entre 15 y 20 años, por el único hecho de ser homosexuales. Una imagen de estos niños colgando en una plaza pública, frente a una inmensa multitud enardecida, nos hacía recordar una imagen del medioevo. Estos actos barbáricos en contra de las personas que se deciden por una preferencia sexual diferente, no deben ser apoyados por ningún gobierno, menos aún por uno que dice abiertamente proteger los derechos de sus ciudadanos ante estos hechos arbitrarios.
Varias organizaciones independientes se han manifestado en contra de la hipocresía gubernamental, de las falsas imágenes que se pretende vender al mundo y a nuestro pueblo. Se necesita más que un programa de televisión, o unas frases permisivas para lograr la igualdad entre todos los ciudadanos de un país. Para que decimos que todos somos iguales, que no se diferencia entre uno y otro y cuando un policía detiene a un homosexual en la calle, lo trata como a un bicho raro. Siempre se ha vinculado a este sector con la promiscuidad, la rebeldía o la excentricidad, no podemos generalizar, sin dudas existen heterosexuales rebeldes, promiscuos y excéntricos, a estos ni nadie lo mira con mala cara. No hay razón para que un ser humano tenga la necesidad de esconderse por su preferencia sexual, ocultarse en la sombra como si estuviera cometiendo un delito, esas son herencias que hay que ir dejando atrás, los tiempos avanzan y hay que avanzar a la par de ellos. Es indignante que los dirigentes gubernamentales hagan programas, tracen planes y proyecciones futuras, que se hable de la facilidad que tienen los cubanos para realizar operaciones complicadas como la de cambio de sexo, y sin embargo interiormente los mismos dirigentes que deben hacer cumplir estas medidas, la policía que debe velar por la tranquilidad ciudadana, los mismos ciudadanos de las comunidades, sientan aún repulsión y marquen su distancia hacia estos grupos de la sociedad.
Es necesario empezar a romper un poco con la hipocresía en que se vive en el interior de nuestro país, hay que empezar ahora a realizar los cambios que sean necesarios, para que este sector marginado de la sociedad civil cubana, se pueda integrar plenamente a dicha sociedad. Y pueda estar seguro de que ese gobierno que dice protegerlos y estar completamente a su favor, haga valer esta convicción donde quiera que este, defendiendo los principios que promueve y que por favoritismo hacia otro estado, por muy amigo que sea, no haga lo contrario a lo que predica. Porque no hay nada más doloroso que el engaño y la hipocresía, de decir una cosa, mientras se piensa y se hace otra.

Tania Mirabal Madera.
Maquillista.
Pinar del Río.

Cosas de telenovelas


Por: Fernando Martínez Calzadilla
Comenzaré diciendo que no soy crítico de arte ni mucho menos, tan solo soy un espectador más, que a veces se deja voluntariamente torturar por algunas de las producciones nacionales que se ponen en nuestra televisión. Nuestro país se ha enfrascado en la producción de series de factura nacional para evitar lo más posible los culebrones extranjeros, los que a decir de muchos especialistas, solo son una pérdida de tiempo para un pueblo trabajador cuyo único interés es conocer de la realidad nacional. La única excepción en la programación nacional son las producciones brasileñas y alguna argentina, que en sus cientos de capítulos divaga en historias que son tan culebrones como las demás, la causa de porque estas si se permiten, es para la mayoría un misterio.
Las telenovelas cubanas en su mayoría producidas con una escases de recursos exorbitante, y sin dudas con un inmenso esfuerzo de nuestros aguerridos artistas(los que aún quedan aquí), desde hace unos años se centran como todo lo demás, en educar al pueblo sobre cómo se logró la tan ansiada independencia nacional, hoy se le da dado un giro completamente distinto a las historias, tratando de darle un toque de actualidad que a veces raya en lo irreal.
En la actual producción del ICRT que cada noche de lunes, miércoles y viernes llega a nosotros y que se llama “Aquí estamos” vemos un ejemplo claro de lo que hablamos, una joven, Cecilia, querida de un gerente extranjero, que apenas sabe leer  y que está siendo reeducada por la integración a este grupo de teatro y por otro joven, Chiralta, un drogadicto que ahora parece ser que también se reintegra a la sociedad gracias a esto. Esta historia nos hace preguntarnos qué hacia la muchachita en la escuela que no aprendió a leer, sobre todo cuando desde hace años se habla de una revolución cultural a nivel nacional, es increíble que alguien que apenas articule una palabra pueda haber aprobado siquiera el festival de la lectura de primer grado. El otro personaje de esta pareja, hijo de un dirigente que se suicidó por robar en su empresa, resulta ser que muy mal actuado, pretende darle clases al psicólogo que debe atenderlo en unas consultas a las que asiste semanalmente, una copia de la película “Una mente indomable” en que se recrea esta misma situación con un chico rebelde y superdotado.  Son tantas las situaciones ridículas que atiborran estas novelas que de verdad hay que pensarlo para verlas, digamos que las personas hablan horas por sus celulares que al parecer tienen crédito ilimitado, cosa risible en extremo, cuando la tarifa de un minuto equivale a la ganancia de una norma en el campo de un obrero agrícola, otra cosa curiosa es como la policía te advierte y trata de educarte antes de aplicarte la peligrosidad social y así escenas que distan tanto de la realidad que se vive que dan pena en verdad.
Siendo realistas y objetivos, tenemos que decir que a los televidentes les agrada ver a actores jóvenes aunque su actuación no sea como la de los consagrados y emigrados antecesores, pero es mejor que se ahorren un poco los recursos a la hora de hacer series como la telenovela que hace poco concluyó y que ahora están repitiendo, su nombre, “Diana” la novela más criticada no solo por la población, sino por la crítica especializada que la catalogó como la más mala hecha en toda la historia de la televisión cubana, y ya ven, de nuevo esta en cartelera, seguro que para cubrir un hueco o para ver qué les parece ahora por segunda vez a las personas que tienen que morder el cordobán de la TV nacional.
La contradicción que crean al recrear una realidad alterada en su totalidad, hace que estas producciones sean algo fantasioso y criticado. Cuanta gente que viven hacinados en huecos de viviendas, no ven las suntuosas casas en que viven todos los personajes de las novelas, se preguntan sin dudas de donde son ellos. La mesa siempre bien servida y los refrescos gaseados que solo ven los niños en días festivos y cuidado, cubren a diario las cenas y meriendas de los irreales personajes, en duro contraste al plato de arroz y chícharo con aguacate que se comen nuestras familias y eso si lo alcanzamos.
Aún hoy después del paso inexorable del tiempo, recordamos producciones como “Sol de Batey” con la actuación de Susana Pérez y Armando Tomey, “La dama de las Camelias”, “Martín Perdida en el Bosque” y otras que siempre serán consagradas por la historia de la novela cubana, tanto por el elenco de actores como por las tramas de la historia, amor, pasión, cosas lindas y dolorosas, que hacían de esta hora un espacio de recreación e ilusión, donde todos se identificaban con algún personaje y lo tomaban como ejemplo a imitar, hoy ni siquiera hay alguien en estas novelas al que quisiéramos parecernos por ser tan irreales . Que quedará en el futuro para las nuevas generaciones, no lo sé, solo sabemos que el camino tomado por la televisión cubana no es el mejor y tienen material humano para lograr grandes cosas, solo que el arte no puede estar en función de la política porque pierde su esencia misma. Ese matiz acrisolado con que uno ve su realidad en la pantalla, pero no la que vive, sino la que quisiera vivir, esa ilusión no debe matarse nunca. Los personajes no son como nosotros somos, sino como nosotros quisiéramos ser. La politización de los medios de difusión masiva y de los espacios que llegan a grandes cantidades de personas, son métodos de divulgación subliminal que los estados debían de medir su uso, porque los pueblos tienen derecho a disfrutar de esparcimiento, sin que medien intereses clasistas o de los grupos en el poder.  Nada que lejos de triunfar en la lucha contra la penetración de los temidos culebrones, está perdiendo visiblemente terreno en este sentido.  Y ustedes mi pueblo, no se dejen engañar por esos nuevos mensajeros de tiempos mejores, que llegan a casa cada noche de lunes, miércoles y viernes, esas son cosas que pasas y que se viven solo en la tv, son cosas de telenovelas.   Y mientras tanto las cosas mejoren voy a terminar de ver, en DVD por supuesto, el final de la novela “Entre el Amor y el Odio” que protagoniza uno de los actores cubanos que produce culebrones en México, César Évora.  

¿Ahorrar, de qué manera?


Por: Juan G. Barrios Planas.

Hace apenas unos días, en que pasando cerca del reloj que marca los kilowatts de corriente, que hemos consumido durante el mes, por poco sufro de un infarto, al ver la inmensa velocidad que tenía este aparato. Lo primero que pensé fue que estaría roto, así que ni corto ni perezoso me dirigí a la sucursal de la empresa eléctrica de mi localidad, después de un rato ya había llenado algunas planillas solicitando la visita de un supervisor, que revisara aquel disparatado instrumento de medición. La visita no llegó hasta el otro día por la mañana, en que un atento inspector de la empresa eléctrica, fuertemente equipado de varios instrumentos para mí desconocidos, midió, observó y por fin resolvió de que el reloj no tenía ningún tipo de rotura, que la causa por la que el contador giraba tan deprisa era sencillamente porque consumía demasiada corriente eléctrica. En realidad esto me preocupó, ya que la cuenta que viene en los recibos mensualmente ha ido aumentando, y este fenómeno fundamentalmente ha ocurrido después de que hacemos todas las cosas de la cocina, con esos dichosos calderos que nos entregaran durante la llamada "revolución energética". Todavía recuerdo aquellos tiempos en que tenía mi cocina pique, cocinaba con keroseno, petróleo, y cuanta cosa ardiera, cuando no había alcohol se precalentaba con el mismo petróleo. Ahora estamos condenados a cocinar una hornilla eléctrica, que contrario a lo que se dice que es un equipo de alto consumo eléctrico, ya que los reguladores automáticos que encendían y apagaban este equipo ninguno funciona, sumando a esto la mala calidad que tienen las resistencias, las que aproximadamente una vez al mes hay que sustituir al precio de 45 pesos, eso cuando las hay, porque casi siempre están en falta y hay que hacer enormes colas para poder resolver. Quiere decir de aquellas jarras y calentadores eléctricos, de lo que sólo queda el recuerdo porque era tanto el calor que desprendían, que terminaron calcinadas en poco tiempo. Las ollas arroceras y la reina de la cocina cubana, marchan a la par en el consumo eléctrico, derrochando la energía que sale tan cara poder generar. Son muchos los refrigeradores que ya están picados, otros han perdido las puertas del congelador e incluso la puerta principal ya no cierran bien, esto provoca una pérdida del frío que repercute en el consumo de energía. Más que justificado está la velocidad con que corren los relojes, entonces hay que preguntarse, a quien se le ocurrió la magnífica idea de toda ésta llamada "revolución energética", que en vez de traer ahorro ha traído despilfarro. Las amas de casa no tienen otra opción que cocinar con estos equipos que se le han dado, la mayoría de las mujeres cubanas, tienen que cocinar en el horario pico ya que son trabajadoras, o por el contrario la comida hay que hacerla lo más cerca a la hora de consumirla para por lo menos engañar el estómago. Es hora ya que se está haciendo tantos análisis sobre temas económicos, que se analicen no la forma en que se va ha cobrar el sobrecargo del consumo eléctrico en los hogares, sino llegar a la causa de lo motivan. No necesitamos más inspectores que busquen si alguien está robando algunos kilowatts de corriente, necesitamos gente consciente del problema real que existe, buscarle una solución viable a este problema del sobreconsumo de estos equipos. Es cierto que quizás para alguna persona que tenga la posibilidad económica de suplir estos gastos de consumo eléctrico, los equipos vendidos por la "revolución energética" sean de gran utilidad, pero para el obrero, el trabajador, o la ama de casa que tiene que pagar una cuenta de consumo que excede en ocasiones sus ingresos, de seguro no ha sido la mejor opción, por eso no es raro que cuando el esposo asustado al ver el recibo de la corriente le exija a su mujer que tiene que ahorrar, ésta le responda con una interrogante ¿ahorrar, de qué manera?.


Juan G. Barrios Planas.
Pinar del Río.
Miembro de la sociedad civil.


Amor, educación y otros conceptos, sobre todo libertad.

¿

Por: Fernando Martínez Calzadilla.

La sociedad cubana ha ido creciendo sin dudas en valores y virtudes, aunque aún le faltan algunos conceptos en lo que debe profundizar. No se si será la formación que se da en las escuelas y otros centros dedicados a la enseñanza de los alumnos, los que han ido deformando el carácter de las cosas y las concepciones de estas. Muchas veces se malinterpretaron las palabras o se les pretenden dar un significado totalmente diferente al que realmente tienen. Cuando se habla de amor, se refiere casi siempre al sexo, las atracciones físicas, los sentimientos hacia otras personas y le brindan una especial atención al amor a la patria, pero no a ese amor que nace en cada persona, dirigido a la tierra donde nació, no, si no a ese amor obligatorio a las ideologías y a los simbolismos, a las figuras de una patria que más que una madre se convierte en una madrastra cruel. Si se toca el concepto familia la noción de esta se va perdiendo con el paso de los años y la mezcla en una misma casa de múltiples generaciones, que pretenden coexistir bajo un mismo techo. El problema de la vivienda ha ido calando sobre el problema de la coexistencia, a tal punto que hermanos y padres viven bajo la presión y el hacinamiento, en espera que suceda algún milagro y puedan desahogarse un poco. Ya el viejo refrán de "quien se casa, casa quiere" no se puede aplicar a una familia cubana, sometida a la escasez del fondo habitacional cubano, tan reducido, que varias generaciones se apilan en un espacio, que fundaron unas personas que nacieron en el siglo pasado. Ya las mujeres, combatientes y federadas, no quieren echar éste último combate, el de la maternidad, el sueño de toda mujer de procrear su propia semilla, de ver crecer su descendencia y hacer su propia familia. Este sueño se ve trunco en más de una ocasión, por los bajos ingresos y las mayúsculas necesidades que aquejan cada hogar cubano, como se puede ser buena madre, si se trae un hijo al mundo a pasar necesidades, ese es el criterio de miles de mujeres, que aún siendo profesionales y ocupando buenas posiciones no desean dar este paso tan importante, para el mantenimiento de una nación. Quizás sea por eso que la población cubana envejece cada día más. La significación de educación es muy controvertida, ya que educar no es atiborrar la mente de los educandos con estándares e ideas o  ideologías preestablecidas. El educador debe dejar la posibilidad al que educar, a que pueda sacar sus conclusiones, a que pueda pensar por sí mismo y utilizar el arte del descubrimiento de sus errores, para trazar el camino que ha decidido en la vida. Imponer, sin dudas no es educar. Hay que hacer una corrección sin dudas, en el significado que tiene para algunas personas conceptos tan controvertidos, como el derecho de las personas a decidir por sí misma lo que desean, como quieren vivir, no importa si es una minoría, porque también a las minorías hay que escucharlas, ya que son sin dudas estas minorías las que forman en su totalidad la grandeza de la nación. La diversidad es lo que nos hace ricos en todas las esferas de la vida, no podemos poner una venda en la boca de los que claman los cambios que creen necesarios. Hay que dialogar y demostrar cada cual sus verdades, llegar al consenso y al debate y no a la humillación del silencio forzado, la cárcel nunca ha sido un buen lugar para ocultar las ideas. Hay que revisar sin dudas muchas cosas más, para que esta nación sea al fin una nación próspera y logre vivir en democracia. Todas las naciones tienen carencias y crisis, así como cada uno tiene sus propios métodos para enfrentarlas, pero sin dudas, si se cuenta con un pueblo entusiasta, se sobrepone mucho más rápido a cualquier crisis. Porque en el pueblo está la fuerza, es en una sociedad civil bien formada, donde están las soluciones a tantos problemas que tenemos enfrentar. El entendimiento de nuestros problemas, está en el análisis de nuestros defectos y la rápida solución de estos, pero para ello, hay que ver bien claro algunos conceptos fundamentales que forman la sociedad y hablar de ellos sin ningún miedo. Ya por ejemplo se habla de sociedad civil, de derechos humanos, de amor y educación, sólo nos faltaría hablar de un concepto clave que nunca se quiere tocar, se le teme como a un tabú, debemos hablar, entender y poner en práctica el concepto supremo de libertad.